domingo, 27 de noviembre de 2011

¡Mirame el pajarito!

Hace un tiempo atrás les explicaba por qué no tengo facebook, en esta entrada.
¿En cuál?
En ésta.

Ahora les explico por qué tengo tuíter.
¿Dónde?
Acá.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Tres son multitud


Para Juan Pascualero, que reclama mis crónicas
Y por supuesto para Ariel,  Lourdes y Vicky, directos responsables de esta crónica en particular

Resulta que a fines de septiembre  se comenzó a anunciar un peculiar espectáculo que tendría lugar en noviembre en el Teatro de Verano: en un mismo escenario actuarían la popular murga autóctona Agarrate Catalina, la también popular banda vernácula de rock No Te Va Gustar (o NTVG, para los amigos) y la  popularísima banda de ska y ramas afines de la vecina orilla, Los Auténticos Decadentes. Confieso que ni se me ocurriría ir a semejante ménage à trois, pero sí se les ocurrió a mi primo y a su esposa, a lo que sumaron su  intención de llevar a la nena, que viene siendo mi sobrina.


Pero… en estos tiempos de soles y temperaturas que se van elevando, resultó que llegada la fecha del recital, a la nena la familia de una de sus amiguitas la  invitó a pasar el fin de semana en la playa, y ante semejante perspectiva, la borrega se calzó las ojotas, largó todo a la mierda y se fue tan campante, dejando a sus padres con una entrada de clavo. Fue entonces que mi primo recordó que no es sobrino único, y me llamó a ver si yo quería ir.  Como sugerí en el párrafo anterior, no soy lo que se dice fanática de ninguno de esos artistas, aunque todos ellos me provocan simpatía, y como de arriba igual acepto una piña, la cuestión derivó en que  el sábado me apersoné en el Teatro de Verano, dispuesta a lo que fuera, incluso a divertirme.


 Una de las tantas fotos horribles que saqué con mi teléfono;
en castigo voy a escribir cien veces: “Debo ir a los recitales
con la Canon porque la cámara del celular es una mierda”

Una noche espectacular, temperatura agradable, y un Teatro de Verano lleno por dentro y por fuera, con un público de lo más variopinto, tanto de acá como de Argentina. Arrancaron Los Decadentes… y de allí en más, todo el toque parados y agitando, porque pusieron toda la fuerza, con sus canciones y con la onda y el desparpajo que los caracterizan.

En segundo lugar actuó la Catalina, con un surtido de temas de varias temporadas (tengo menos carnaval que Kabul, así que no puedo precisar). Me divirtieron mucho los cuplés (¿Se dice así?) como el de la perra Manuela y el del novio de la nena, pero las canciones de murga me aburren un poco, qué le voy a hacer… No son ellos, soy yo, así que sigan en lo suyo. Igual el Zurdo Bessio despertó encendidas demostraciones de afecto y admiración por parte del público, y Martín Cardozo encendidas demostraciones de altos niveles de hormonas por parte de cierto público femenino. 

Otra foto horrible



Para el final quedó  la actuación de NTVG; parafraseando al torero Jesulín de Ubrique, “en dos palabras: im presionante”. La energía que desplegó esa gente en el escenario fue tremenda; cantaron canciones de todos sus discos, invitaron a los Decadentes y a los Catalinos en más de una oportunidad (bah, todos intervinieron en los toques de los demás), y también actuó Mateo Moreno, un exNTVG, que vino con un corte de pelo espantoso (qué necesidad, un botija tan lindo). Ni que decir que siendo la noche siguiente a los CUATRO GOLES DE LUISITO SUÁREZ CON LA SELECCIÓN NACIONAL, el teatro entero estalló con “Cielo de un solo color”. Hasta hubo un momento bastante particular, que solamente puede ocurrir en esta ciudad imaginaria que es Montevideo, en que todo el mundo cantó a capella “Zafar” de la Vela Puerca, que no tenía vela alguna en este entierro, ni puerca ni de ningún otro tipo, bajo la batuta de Emiliano Brancciari, que estaba con todas las pilas.

 Así que al final, la providencial ausencia de mi sobrina redundó en una noche atípica, pero de lo más disfrutable. Estoy dispuesta a que se repita, así que Vicky, andá sabiéndolo.

Para finalizar, los dejo con este maravilloso video de los Decadentes; corran los muebles, y pónganse a bailar ya.